UN GRUPO DE RAROS TOMÓ MI CASA

Después de tres años, tres cuatro mudanzas y una constante automotivación, presenté una de mis obras favoritas en la Ciudad de México. Fui invitada a participar en esta exposición colaborativa en la que artistas internacionales y nacionales presentaron el arte que conforma Un Grupo de Raros Tomó mi Casa bajo la curaduría de Tony Solís.

Después de ver las mismas bolsas de fritos en el suelo de mi caminata diaria, tomé la decisión de empezar cualquier día. Aquellas impresiones en aluminio no esperaban tener una segunda oportunidad, ya habían cumplido su objetivo de contener alimentos efímeros.

´´Cuando llegué, ya estaba ahí. Un oso gigante andrógino con ojos desiguales rasgaba mi sofá con uñas pintadas de negro. Una mujer de labios azules lamía las paredes, murmurando poemas en un idioma que no entendía. Un niño de género incierto, con dientes afilados y una corona de papel, hundía las manos en mi pecera y reía.

-Ahora es nuestra – susurró uno, con voz de todos.

Intenté correr, pero la puerta ya no estaba. Solo quedaba un espejo. Y en él, mi reflejo sonreía, invitándome a quedarme.´´

FEBRERO 2025